jueves, 1 de noviembre de 2012

Cementerios de nacimiento

Cementerio andino, Salta, Argentina. Foto: Ángel m. Bermejo (c)


Estos días de principios de noviembre se dedican en el mundo católico a recordar a los difuntos. Como sí hiciera falta una fecha concreta para que recordemos a nuestros muertos, que pueden estar más presentes en nuestro día a día que muchos de los vivos que nos rodean.
Hay quien dice que conviene visitar los cementerios de las ciudades a las que se llega, porque la forma de tratar a los muertos dice mucho de una sociedad. Esos detalles resultan evidentes de un solo golpe, lo que resulta muy cómodo e instructivo. Es una teoría. 
Uno visita cementerios en los lugares por los que pasa porque va en busca de la tumba de un personaje que le atrae por algún motivo, porque le han dicho que tiene un interés especial, o porque se los encuentra sin querer.
Este año, al recorrer el noroeste de Argentina, los iba viendo desde la carretera. Aunque estuvieran alejados, destacaban en medio del paisaje áspero y hermoso de los Andes. A veces se veía el cementerio pero no el pueblo. 
En una ocasión paramos para fotografiar un cementerio desde la distancia. Un río nos impedía acercarnos a él. Allí estaban las tumbas, apretadas en una ladera, como si no hubiera sitio para estar más anchos a pesar de estar rodeadas de soledad. 
Al verlo se me ocurrió que ese cementerio encajaría bien en un nacimiento. Si, ya sé que un cementerio es lo más opuesto posible a un nacimiento, pero igual que está el pesebre, y se ponen ríos, puentes, casas, montañas y hay pastores, reyes magos, camellos, burra, buey, ovejas y hasta personajes escatológicos, también debería haber un cementerio. Tal vez al fondo, en segundo o tercer plano, para recordarnos a todos la naturalidad de los cementerios. 
Si yo diseñara un cementerio de nacimiento me inspiraría en ése que vi desde la distancia en un valle de los Andes argentinos.  

4 comentarios:

  1. Subscribo totalmente lo del recuerdo de aquellos en cuánto a su presencia sin estar.Por otro lado,es cierto lo que dice sobre esa imagen.Sin duda que evoca eso,un nacimiento de los que solemos preparar en Navidad.Es una imagen tierna esta.
    Saludos.

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  2. Tiene una pinta estupenda. Y tu descripción es estupenda. Creo que, como dices, evoca un Belén navideño.

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  3. Hola Ángel, nos gustaria iniciar una cooperación con tu blog.
    Ponte en contacto con nosotros si tienes intereses a través de correo electróncio: maria.fernandez-porcel@unister-gmbh.de

    Muchas gracias y muchos saludos

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  4. ángel. estoy descubriendo tu blog. veo que tarde. está muy bueno. abrazo,
    camilo.

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